Los secadores de pelo son ruidosos por naturaleza y se usan cerca de los oídos, lo que aumenta el riesgo de irritación y daño auditivo a largo plazo. Los secadores silenciosos están diseñados para solucionar este problema reduciendo las tonalidades de alta frecuencia (comúnmente conocidas como "agudeza"), a las que el oído humano es especialmente sensible. Además, cuentan con hélices de sonido más suave para eliminar las irregularidades en el ruido del flujo de aire, lo que ayuda a que el aparato suene uniforme y eficiente. Al reducir estos sonidos ásperos, los secadores de pelo no solo son más silenciosos, sino que también brindan una experiencia de aseo más placentera y relajada.